¡Hola chicas! ¿Cómo están? Me he inspirado en este tema porque es algo que me sucede a diario y me pongo a pensar si es algo que me pasa solo a mí o habrá otras mujeres que se identifiquen conmigo. De pronto, me puedan ayudar con sus consejos también.

Como les había comentado en mi perfil, tengo dos hijos maravillosos a quienes amo. Pero, en realidad soy mamá primeriza de Noah quien tiene actualmente 8 meses y soy mamá de corazón de Theo, quien llegó a mi vida un poco antes de tener 2 añitos de edad.

Realmente mi vida ha entrado a una gran aventura y se ha transformado por completo con la llegada de ellos. Sinceramente no sé cómo pasó, pero así sucedió. Haciendo una recapitulación de mi vida puedo recordar que uno de los miedos más grandes que tenía en mi soltería  era si iba a tener tiempo para mí como mujer, era algo que pensaba por todos los nuevos roles que iba a emprender.

Contándoles un poquito más sobre mí; me considero bastante coqueta. Siempre me gustó cuidarme en todo el sentido de la palabra y el solo hecho de pensar que los protagonistas de mi vida serían otras personitas, por momentos me abrumaba bastante, ya que sabía que mis planes se tenían que acoplar a los de ellos =). Así que, cuando llegaron, les puedo reconfirmar que eso fue lo que pasó. A tal punto que el primer mes ¡Ni me acordaba de que yo existía!

Todos los días pueden encontrar un tiempo, dedíquenselo a ustedes mismas, pero que sea un tiempo de calidad.

Hoy en día las cosas han cambiado y dedico un poco más tiempo para mí. Pero, he notado que algunas veces salgo sin maquillaje, por ahora he desistido de los tacones, no siempre tengo tiempo para ir a la peluquería, ya no cuento con el mismo tiempo para salir con mis amigas; y, a pesar de todo eso les puedo decir que esas cosas ¡No me hacen menos mujer! Más bien, siento que al asumir este nuevo rol cuento con un mayor crecimiento y que ante todo soy una mujer más madura.

El trabajo de ser mamá realmente no es fácil y sobre todo cuando tienes la responsabilidad de llevar la armonía en tu hogar, dedicar tiempo para tu esposo y cumplir con las tareas adicionales de tu vida. Las 24 horas muchas veces quedan cortas.  Pero, también es verdad que al ver los ojitos de ternura de tus hijos, al acostarte a lado del hombre que amas y el aprendizaje que obtienes con todo lo que haces, eso termina siendo una motivación para querer seguir al siguiente día y empezar con la fortaleza y las energías que solo las mamás las podemos tener.

Pero, también es muy importante de que no nos olvidemos de nosotras, ya que aunque parezca mentira somos nosotras quienes terminamos automotivándonos para continuar. Así que, creo firmemente que todos los días pueden encontrar un tiempo, dedíquenselo a ustedes mismas, pero que sea un tiempo de calidad.

Y déjenme darles un pequeño consejo más, si se encuentran en esa etapa en la que deben ser mamá, cualquiera que sea la situación, permítanse equivocarse, que no todo sea siempre como los demás desean y dense la libertad de decir “no puedo”, “ahora no”, estoy cansada”, permítanse pedir disculpas y permítanse ser más humanas =).