La vida trae consigo un cúmulo de experiencias y decisiones, pero después de cada cosa que te sucede es necesario que te vayas preparando espiritualmente y enriqueciéndote mentalmente. De eso se trata la vida.

Existe un regalo que solamente nos podemos dar nosotros. Ese regalo está colmado de emoción, satisfacción plena y aquella paz mental que tanto anhelamos.

AMOR PROPIO se llama, sé que lo has escuchado o de pronto lo estés viviendo. Sino es tu caso, llegó el momento de que despiertes y empieces a vivir las mejores aventuras contigo mismo.

No te vas a arrepentir porque darte amor y respeto es la manera más sublime para tratarse a uno mismo. Esto influirá 100% en la forma de proyectarnos como seres humanos y en nuestras relaciones sociales.

La prioridad eres tú, no se trata de egoísmo ni narcicismo es equilibrar lo físico, mental y emocional.

El amor propio no es solo vestir bien, estar en forma, leer libros de autoestima y llevar una vida con mesura. Es también saber valorarnos y apreciar con determinación cada cosa y momento que construimos, la clave es no dejarnos vulnerar por las situaciones difíciles que atravesemos.

Además, es aprender a reconocer tus habilidades para seguirlas fortaleciendo y debilidades para aceptarlas y trabajar en lo que sabes que no está bien en ti.

Así encontraremos significado y sentido para nuestros propósitos y todo lo que necesitemos vendrá poco a poco.

Cuando te quieres a ti mismo aprendes a decir NO y estableces límites porque sabes lo que te hace daño y no te permite avanzar ni brillar.

El amor propio es como una luz sobre tu mente y cuerpo que te ayuda a conocerte como persona, que te permite razonar y entender qué es lo que mereces en tu vida.

Asimismo, influye en que seas selectivo con tus amistades y mejores tus relaciones con los demás, que seas una fuente de energía y que bloquees todo lo tóxico en cuanto a situaciones y personas que quieran dañar tu integridad.

Cuando permites que una persona dirija tu vida y haga que solo sus deseos se cumplan, es necesario que te alejes porque vas a terminar dando hasta lo que no tienes solo por hacerla feliz, debido a esto no pensarás en ti y marchitarás tu esencia.

Es obvio que te equivocarás en algún momento, pero no temas, esto es parte de tu historia. Para seguir, primero es necesario perdonarse a uno mismo, solo ahí sentirás libertad y plenitud, sin duda alguna aprenderás tu lección por más insoportable que sea.

Recuerda que siempre merecemos volver a empezar y la mejor manera será priorizándote, si te amas tú serás capaz de destellar amor a los tuyos y tomar sabias decisiones.

No busques tu otra mitad, porque tú no eres una mitad, eres un ser humano completo, entero, íntegro,  que sabe del amor y ahora más que nunca del amor propio. El amor de tu vida eres tú mismo.